miércoles, junio 24, 2009

Hacer una cobra

Lo primero que tuve claro de “Pagafantas” es que debía empezar describiendo lo que era una cobra. Me parece un momento tan intenso en la vida de una persona que no se me ocurría mejor manera de comenzar. Retratar el instante en que decides lanzarte a besar a alguien y en una fracción de segundo la confianza y la seguridad se convierten en vergüenza y humillación.

En esa fracción de segundo todo cambia. La situación, en principio idílica y propicia para el amor, se torna en una pesadilla. Es probablemente la situación más dramática del mundo. No me refiero a que sea la más trágica, que también, sino a que si una historia se basa siempre en cambios, giros, evoluciones, una cobra es el gran vuelco.


No era la primera vez que filmaba una cobra. Mi momento favorito de “Éramos pocos” es cuando Mariví Bilbao, completamente ebria, intenta besar a Ramón Barea y éste le hace una cobra. En el corto Mariví es su suegra y una cobra a una suegra borracha es siempre un gran momento vital.

La cobra con la que empieza PAGAFANTAS es más de andar por casa. Sábado noche en un bar, llevas hablando horas con una chica y te lanzas. Un clásico. Espero que cuando lo veáis penséis que el momento está bien captado.

miércoles, junio 17, 2009

Push the button

Preguntas que me hacen frecuentemente en los últimos días.


La primera: “¿Cuándo se estrena PAGAFANTAS?” La respuesta empiezo a decirla antes de la sílaba "tre” de "es-tre-na". “El 3 de julio en los mejores cines”.


La segunda: “¿Estás nervioso?” A eso suelo responde que de momento no, que ya me pondré histérico según se acerque la fecha.


Lo cierto es que queda poquísimo. El 3 de julio me parecía muy lejano cuando vi la primera copia estándar en Technicolor allá por Navidad y determinamos “vale, ya está acabada”. Pero no falta casi nada y las señales externas apuntan con insistencia. Han empezado a emitir promos en Antena 3, el trailer ya se puede ver en cines delante de muchas pelis (tan diversas como “Terminator Salvation” y “Coco Chanel”), los cines ya tienen carteles de PAGAFANTAS en las paredes, salen las primeras críticas de la peli en revistas, los actores y yo damos bastantes entrevistas y en la parte más simbólica-emocional-superficial está esto:



Suponéis bien si pensáis que me hace ilusión ver un cartelón de la peli en la plaza Callao de Madrid. Me hace MUCHA ilusión. Mi amigo y paisano (tan paisano que crecimos en la misma calle de Donosti) Koldo Zuazua lo sabe y por eso me mandó esta foto desde un ángulo tan peculiar.


Por todo eso, he decidido presionar el botón de “estar nervioso” acordándome del botón imaginario de una película que quizás ha sido la mayor influencia en PAGAFANTAS. Se habla mucho de Blake Edwards y de Billy Wilder pero en los 50 y 60 algunas de las mejores comedias que he visto las firmó un tipo llamado Richard Quine. Os pongo la escena del botón:




Pues eso, ya cuando me pregunten si estoy nervioso por el inminente estreno ya podré decir que un poco sí. Tampoco mucho, la verdad. Como se dice en PAGAFANTAS, yo estoy contento y eso es lo que importa.